::Gaitas en el cielo::

Al retornar de mis raices, el dia 10 de enero.. de un bello pueblo llamado: Las Flores, Marlon mi esposo, me dijo: el dia despues que te fuiste llamó Wilber para invitarte a visitar a Zary, parece que se complicó; ahora está en una silla de ruedas y tiene una bala de oxigeno.  Me sorprendi y dije: ¡Miercoles!, bueno..una tarde de estas me acompañas a visitar a Zary.  Asi que las tardes pasaron pero no el mes cuando, el 20 de Enero a las 4:00pm volvió a llamar Wilber:

Hola corazon como estas?
Triste

...No puede ser!.... le dije!

Si!...Zary murio hoy a la 1:30
El sepelio será mañana en Carillo.

Suspire bien ondo...como sólo se suspira cuando deseas oxigenar el cuerpo entero, despues de sentir que le hace falta de todo un poco..    El oxigeno a la cabeza; como aire fresco por las tardes observando un bello paisaje, me trajo tu rostro alegre, tu sonrisa fresca, tu voz fuerte, tu parado firme, tus pantalones y tus camisas manga larga inseparables en la univesidad, tu caminado ligero y ladeado, tu gusto por la música, el amor por tu tierra y tu gaita, pero sobre todo, recuerdo tu buen sentido del humor... tu creatividad y tus comentarios certeros, francos...directos.

Llamadas, comentarios, fotos del recuerdo saturaron mi celular y nuestros muros en facebook, lamentando la partida de una amiga, de una artista... de una guerrera; que cargó y lucho contra un demonio por mas de tres años, pero nunca lo hizo notar, siempre tu mirada fue plena, llena y tu rostro iluminado.

Hoy podemos decir para calmarnos, y para resignarnos, que sólo te adelantaste.

El dia de tu sepelio, como en la univesidad, estabamos tus amigos, unos de cuerpo y alma, otros sólo de alma por la distancia... pero unidos por el sentimiento.    Queria llorar, pero tus manos no me dejaban, senti en todo momento que estabas alli.. FELIZ...

Sabes, en realidad te sentí feliz, dichosa... Fue un sepelio digno de una gran mujer, que incluia desde decreto del Alcalde de San Pelayo ordenando un dia de duelo por tu muerte, hasta lectura de tus compañeros de trabajo de medellin, melodias de gaitas, cumbiamberas, trompetas - como una reina- , asi dijo tu madre con la voz entrecortada y el alma hecha pedazos...."Me despiedieron a mi hija como a una reina".  

Sobre tu ataud reposaban flores, tu poncho, tu sombrero, tu gaita... al ver y sentir todo esto, me dije:.. Asi se debe morir, ¡Caramba mujer solo 33 años, la edad de cristo y todo lo que hiciste, todo lo que lograste!.  En ese momento me sentí tan  orgullosa de ti y de ser tu amiga, de conocerte, de haber gozado contigo un capitulo de formación y continuar despues a pesar de la distancia, con nuestra amistad.

Hoy tu vida, tu lucha, tu exito como artista, me deja muchas enseñanzas, y a pesar que al evocarte me lleno de nostalgia; tu alegria y tu juventud eterna, me sostienen.  Y me alegro porque gaitas fueron al cielo... y desde alli, siento que me tocas, me animas, me levantas, me acompañas, me contagias aun más de buena energia, de tu gran alegria.     ¡Gracias Mujer...Gracias Zary!.